Gérmenes, microorganismos, contaminantes, residuos,… cuantas cosas contiene el aire comprimido que empleas en tu industria que amenazan la calidad de tus procesos. Y si trabajas en alimentación, bebidas, productos farmacéuticos o con productos igual de críticos la amenaza es muchísimo más grave. Vamos a hablar en este blog de como evitar este peligro.
Para que el aire comprimido quede exento de aceite, gérmenes, y otros agentes perjudiciales tenemos que conocer sus causas y los problemas que pueden conllevar.
Como técnicos de mantenimiento y responsables de producción tenemos que conocer las soluciones a estos problemas cuando realizamos actuaciones de aire comprimido.
Ten siempre en mente los requerimientos de tu industria en cuanto a calidad del aire además de los más obvios de presión y caudal.
Somos expertos en aire comprimido, no sólo como compresoristas experimentados sino también como suministradores de equipos de proceso, neumática y tuberías. Desde nuestra oficina técnica os iremos dando dosis de formación que os ayuden en el diseño, mantenimiento y gestión de sistemas completos de aire. Hasta la utilización y desde la generación.
1. ¿Qué causa la contaminación del aire?
Las partículas, los gérmenes, el aceite y la humedad son impurezas que no podremos evitar al estar presentes en propio aire ambiente. Entran en nuestras tuberías a través del compresor y hay que eliminarlas, mitigarlas o evitar su proliferación.
Además el propio proceso de compresión puede añadir contaminantes adicionales a los provenientes del ambiente. La contaminación puede provenir de una infinidad de causas externas e internas. Para evitar un mal funcionamiento del sistema de aire comprimido hay que mantener limpios sus componentes, desde los compresores hasta la valvulería o las tuberías.
Las normativas que miden la calidad del aire como la ISO 8573-1:2010 se centran en los tres contaminantes más habituales: partículas sólidas, humedad y aceite (hidrocarburos).
2. ¿Por qué en el sector alimentario es más crítico?
Cuando tratamos con industrias e instalaciones del sector alimentario, las consecuencias pueden ser graves. Existe un peligro constante de que el aire se vea contaminado por impurezas, tales como el aceite o los gérmenes, y que pueda entrar en contacto con el producto en aplicaciones de transporte, elementos de proceso, en el de embalaje de alimentos. La humedad dentro de las tuberías puede favorecer el crecimiento de colonias de gérmenes. Incluso el aire de los escapes de automatismos afecta el ambiente de una fábrica y puede contaminar zonas teóricamente limpias. Incluso evitando gérmenes y empleando lubricantes de calidad alimentaria se puede llegar a afectar las propiedades organolépticas de los alimentos.
Las restricciones y exigencias sanitarias en cuanto a productos de alimentación hacen que mantener una instalación y un aire comprimido limpios de impurezas sea vital.
Aquí te dejamos un ejemplo de cómo actuar para renovar y limpiar el aire comprimido de una sala de compresores, mejorando así la producción, en un cliente del sector alimentario.
3.-Problemas en el sector alimentario
Los problemas que puede conllevar un mal mantenimiento de los sistemas de aire comprimido en el sector alimentario son varios:
• Contaminación por contacto directo tanto con el producto final como con el material de envasado.
La condensación, el aceite líquido del compresor, el vapor de aceite o hidrocarburos gaseosos que desprenden aromas, las partículas sólidas indeseables (óxido, partículas de corrosión, abrasión,…), o los microorganismos son aspectos a tener en cuenta en nuestras instalaciones de aire comprimido o en el mantenimiento del mismo.
• Por contacto indirecto. Al liberar aire comprimido y expandirse éste puede alcanzar otros objetos o productos a través del aire ambiente.
Con estas ayudas se incentiva la reducción de emisiones de dióxido de carbono y el consumo de energía final en la industria.
Como guía de buenas prácticas para la generación y tratamiento del aire comprimido para aplicación en industrias de alimentos y bebidas, las principales organizaciones reguladoras y/o de asesoramiento en esta cuestión, como son la ISO (International organization for standardization) o la BCAS (British Compressed Air Society) estipulan que se debe cumplir o exceder la ISO 8573-1:2010 de acuerdo con:
CONTACTO DIRECTO → CALIDAD 2-2-1
CONTACTO INDIRECTO → CALIDAD 2-4-1
4.Soluciones para evitar lubricantes en el aire comprimido
La obtención de aire comprimido sin aceites u otros agentes contaminantes se puede realizar de diversas formas. En futuros posts hablaremos de la filtración y el secado del aire, en este nos centraremos en la eliminación del aceite.
Lo primero es decidir, según las necesidades del cliente, si el aire comprimido sin aceite debe estar centralizado o descentralizado, es decir si haremos un tratamiento centralizado para todo el caudal de aire distribuido o si distribuiremos aire de menor calidad y aumentaremos su pureza con tratamiento en el punto de utilización. Y partir de esta planificación inicial disponemos de diversos sistemas y tratamientos:
5.-Tratamiento por catálisis. Descomposición del Aceite
La utilización de un catalizador independiente de las condiciones de aspiración, en vez de los habituales filtros, nos aporta un proceso de producción libre de aceite, gérmenes o bacterias.
Se trata del método más eficiente, fácil de instalar y con menores costes de mantenimiento.
A través del catalizador se limpia el aceite del aire comprimido y se controla la energía térmica necesaria para que las impurezas no se trasvasen en los sistemas de producción.
6.-Tratamiento por absorción. Absorción con carbono activo
Liberar de olores y sabores el aire comprimido que pasan por los compresores es fundamental en una industria alimentaria para que no afecte a sus productos acabados.
Se pueden utilizar microfiltros o filtros de carbón activo, pero para volúmenes mayores recomendamos la utilización de absorbedores para eliminar los vapores de hidrocarburos o los aceites residuales.
Se trata de un sistema que protege de la entrada de aire y proporciona una larga vida útil.
7.-Compresores libres de aceite. Evitar el aceite añadido en generación
Gracias a los compresores libres de aceite el aire comprimido no entra en contacto con agentes líquidos o gaseosos. Se mantienen sellados y ofrecen la máxima precisión. Recomendamos las gamas Sierra y Nirvana oli-free de nuestra marca representada Ingersoll-Rand.
Sin embargo, este sistema implica altos costes de inversión y una presión operativa limitada.
Uno de los proveedores de sistemas libres de aceite con el que más confiamos en Daunis es BEKO Technologies y sus sistemas BEKOKAT®. Te animamos a que sigas mirando en su página web para informarte de las mejores aplicaciones de aire comprimido para tus instalaciones.
Recuerda que, sobre todo para tus clientes del sector alimentario, las consecuencias de un aire comprimido en mal estado o con impurezas puede representar una mala calidad de sus productos y una pérdida económica importante.
Si tienes dudas o quieres que te asesoremos desde Daunis, contacta con nosotros.